Sobre este blog...

Este es un espacio para los estudiantes de posgrado en derecho con la finalidad de poder intercambiar ideas y servir como plataforma para la obtención de materiales interesantes acerca de la filosofía del derecho.

martes, 18 de octubre de 2011

Hypathia: nuevamente la lucha por el derecho


Hypathia de Alejandría, la santa laica o ¿quién sabe? porque algunos historiadores suponen que fue convertida por San Agustín de Hipona, ciertamente contamos con datos escasos, pero al menos los necesarios para saber que se interesó por diversos saberes y que logró prestigio en su tiempo, lo cual supone la interesante historia de una mujer tenaz que supo colocarse en los foros y hacerse escuchar.

Los mismos datos escasos tampoco permiten asegurar como murió, ciertamente murió vieja y al parecer asesinada pero lo que no se puede precisar es si murió con premeditación o fue un accidente.

Sabemos poco de las filósofas de la antigüedad lo cual no supone que no hayan existido, las fuentes son escasas y hay que rascar por debajo, detrás y al lado de los pensadores varones, tal vez suponiendo que algunas de sus teorías quizá las obtuvieron después de una conversación con alguna dama cercana a ellos. De cualquier modo la filosofía no debería tener género, si se trata de una verdadera filosofía es entonces un ejercicio por y para seres humanos.


Ahora venimos al caso de "Agora" de Alejandro Amenabar, un director activista, que siempre escoge temas polémicos, y en este caso no es la excepción aunque tal vez se le pasa un poco la mano con su anticlericalismo y termina condenando históricamente a algunos personajes, la cosa está tan clara como que los buenos van todos de blanco y los cristianos todos de obscuro, nos vende la idea para él clara de la confrontación entre fe y razón, y la imposibilidad de buscar vías de diálogo, una especie de positivismo intolerante, pero bueno, tampoco es que el director debe ser objetivo, es su propuesta y su batalla, pero siempre está bien saberlo para poder distinguir entre el discurso del director y la historia de la filosofía.

La riqueza de la película es evidente, un gran esfuerzo por recrear la época, que cinematográficamente no había sido tan tratada como ahora, es emotiva y ayudaría a favorecer la empatía por la lucha de las mujeres respecto de su igualdad e incluso su superioridad, aunque se corre el riesgo de pensar que personajes como el de Hypathia son totalmente idílicos, es casi la encarnación de la prudencia, una alegoría en carne viva, porque es sin duda la más sabia de la película. Nuevamente el tema de la expiación del filósofo para denunciar una injusticia, un maravilloso film para hablar de la libertad de pensamiento y la libertad de expresión, en este caso le toca a una mujer sufrir discriminación por parte de sus coterráneos que a pesar de la evidente clarividencia de pensamiento e incluso la autoridad moral que tiene sobre muchos, por los prejuicios tienen que sucumbir ante la realidad y dar paso a acciones injustas e irracionales, en la propuesta de Amenabar fruto de la obcecación religiosa, pero en la metáfora puede decirse más ampliamente que a Hypathia la mataron por pensar y poner en evidencia los prejuicios de la clase dominante.

1 comentario:

  1. Tengo mis dudas sobre si toda la filosofía debe de olvidarse de la cuestión subjetiva, acaso no es uno de los grandes problemas del derecho el ignorar las diferencias?

    Es mejor la filosofía si quien la hace no se ocupa de subjetividad?

    Deben las mujeres olvidarse de su condición para entonces sí hacer filosofía?

    Tal vez haya temas donde sí debe olvidarse de quien lo hace y otros en que no, tal vez la mejor respuesta sigue siendo "Depende..."

    ResponderEliminar